"... como decíamos ayer..."

... dime la verdad... me habías echado de menos?

Pregúntame dónde he estado, pregúntame qué he hecho, pregúntame que a ver si te cuento caramelos y golosinas, algo que se te cuele por la garganta y se te retuerza en el estómago, con suerte, te cuento una mentira divertida, una carta que te cuente la cara oculta de la Luna o te cuento un cuento y tú haces como que te lo crees. O no. Mira, como ni me puedes responder, déjame que me columpie...

Demasiado ocupado siendo feliz, qué quieres que te diga. Escondido entre papeles, sobreviviéndome pensando que todo esto es una jungla y que soy Tarzán, asaltando al cielo para que no se diga que fue una fantasía... o se te había olvidado?. Dijimos que asaltaríamos las manianas y nos llevaríamos el botín para ponernos ciegos, dijimos "o lo sublime, o nada" y no pude quedarme quieto, dijimos que lo mejor estaba por llegar y me alegro de verte porque, desde que me monté en el tren, no he dejado de masticar carbón y escupir fuego y mira la velocidad que sigo llevando, ya llego hasta maniana, mira qué bien me columpio, voy y vengo y me queda cuerda para decirte que, si no te he contado antes, estaba invirtiendo el tiempo en una tragaperras la mar de mona, que me hizo así y le metí lo único que me quedaba: la gorra. Y me llevé el premio gordo. Y me lo jugué. Y volví a ganar. Y después, con todo lo que hube reunido, me lo volví a jugar porque sí, porque ya que somos toreros, nos jugamos el pecho otra vez y a tomar porculo el respetable. Y volví a ganar. Es lo que tiene el karma. Después de haber comido tanta mierda, ahora cago oro.

Y, desde que salí volando, he descubierto diecisiete estrellas, setenta y un planetas habitables con sus lunas respectivas y miles de estrellas fugaces que van y vienen y que les queda cuerda para contar. Son planetas habitables, tienen tresillos, sofás y televisión, para los que quieran ser idiotas, tienen balcones, parques, bosques y sitios donde celebrar tu cumplenios sin molestar a los vecinos; son planetas habitables, tienen sus bombillas, sus garitos para fiestas privadas y si no los encuentras, cuenta con mi piso, que lo organizamos todo la mar de bien; somos planetas habitables, tenemos cocina, salón y un sofá grande donde se pueden dormir las tardes una detrás de otra, tenemos radio en estéreo, internet en tarifa plana y agua caliente, tenemos calamares, puntillitas y Schweinehaxe calentito y crujiente, qué más quieres, morena? te vienes a hacer de astronauta y a hablar en extraterrestre desde por la maniana? que yo también soy un planeta habitable, tengo arbolitos, ríos y laderas; tengo playas, golfos y santos; tengo sotas, caballos y hasta reyes, imagínate qué partiditas podríamos echarnos al ladito de la estufa, no seas tonta, pásate por taquilla y píllate una entrada baratita, tengo un espectáculo dentro que ríete de la Feria de Sevilla. Soy un paraíso, quieres manzanas?.

Ahora sí. Ahora llámame chulo, borde, hijoputa o cabrón. Ahora llámame como quieras porque me voy a dar por aludido: tienes razón, lo que me digas es la verdad. Da igual si cambias de opinión maniana, vas a dar en el clavo. Por fin estoy en el paraíso de los tontos. No me lo merezco? Y además que se está de puta madre. Desde el lejos te duelen las cosas la mitad. O menos. Y si a eso le juntas las vacunas que uno lleva de serie, estoy hecho un tigre. Tú sigues pensando que son bufaladas, yo te digo que esto son las ganas de follarte que tengo, pero como no te pillo, le doy a las teclas. No me suspiran como tú, pero tienen su puntito. Qué se le va a hacer. Menos es nada.

Así que, que no se te olvide, no me estoy haciendo el muerto, estoy viendo la superficie marina desde lo más arriba que se puede. Quiero decirte que todavía me quedan flechas para dispartarte al pecho, que en este tiempo me he dedicado a recoger piedras para tirartelas a tu ventana, a ver si echo abajo el cristal y me cuelo a robarte. Quiero decirte que, cuando vuelva a estar en forma, te parto la pantalla del ordenador cuando me leas, pero que, por ahora, confórmate con este caramelito, para que se te derrita en la boca y no me olvides, tonta. A estas alturas de la película, un "... recuerdas?" no calienta el alma. A estas alturas de la película hay que dar la talla y me alegro que hagas los deberes todos los días: te estás mereciendo lo que se te viene encima. Y no es ninguna maldición, todo lo contrario, cuando comes mucha mierda, acabas cagando oro. (iba a decir"supongo", pero esta vez, no).

Mira por donde, te dije que te iba a contar un cuento y he acabado contándote la verdad. Ya no me queda imaginación. Perdona si estoy bajo de forma. Ya te dije que he vuelto a practicar. Mientras tanto, afinando el arpa, mira qué pose se me queda mientras te estoy escribiendo ésto. No me digas que no estoy guapetón. Sí, mejor que lo supongas, ya te dije que estoy hecho un tigre. Si no fuera porque he dejado de comer carne, sería verdad. A ver, qué animal hay, que sea grande y que se alimente de hierba?... un Búfalo?, pues llámame Búfalo!

Búfalo.

Sonntag, 29. November 2015

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