Cinco y media y suena el despertador... recuerdas? “Estás seguro de lo que estás haciendo?”
No hay tiempo de pensar, café como un martillo, dúchate y aféitate, ponte una camisa planchada y disimula, que no se note que anoche te pusiste fino y que has dormido dos horas y media. Maquíllate el pecho como si llevaras alma, si lo haces bien nadie notará quién eres y hop!, a la bicicleta a perder el resuello por el camino. “Te estás convirtiendo en otro que no conozco”, “Sí que has cambiado”, “Ya eres otro, no te conoces ni tú”, la bicicleta tiene diecinueve dientes, corro, ser puntual es importante. Treinta y cuatro personas esperando. Saca las pistolas y no dispares, que no se note que las tienes a mano.
Y entonces ya estás desintegrado, “Quién eres?” dice una voz detrás de la oreja. No la oyes, mueves los brazos como si fueras o fueses. Presentas El Evangelio porque así tiene que ser. Ellos tienen otra realidad, ellos tienen las rosas y las flores de la primavera recién estrenada, el verbo fácil y la piel tensa, ellos tienen los violines y yo tengo piedras, ellos escupen y yo disparo “Nunca podría ser como tú” dice el viento, pero a esas alturas ya has matado a tres sin esfuerzo y esperas que vengan más. Flores, versos, colores rosas y celestes y apriétate la corbata que no se te vean las cicatrices. Te contienes, no dices que son unos hijosdeputa sin estilo, no les esputas que no tienen ni idea, que necesitan de metralla en los huesos para ser robustos, ellos no te dicen que eres una puta pero sabes que lo eres, un travelo, tú también pones el culo para que un jefe misericorde te cure las heridas con euros, da igual, cuando eres tú quien tiene el látigo a los otros les toca bailar. Lo demuestras, que has pasado por el aro y que ya eres profesional, que tienes puntería para dar en la cabeza y que hueles el hachís aunque lo escondan en un bote de colonia. Ellos obedecen porque así tiene que ser. “Ya no te conozco” susurra el aire por la ventana antes de cerrarla para que no moleste. Y la cierras.
“Hablar contigo es como cortar carne cruda con las manos”. Llegas a casa y gracias a Dios aún te queda algo de salvación en el botiquín. A suspiros ves cómo se pasan las horas mientras planeas el siguiente asalto. “Eres un campeón” piensas, quieres pensar que eres un campeón pero sólo has afinado la puntería, quieres pensar que fue la decisión correcta porque a estas alturas ya no te equivocas, ya estás blindado por instinto y no sabes en qué piensas cuando miras las fotos. El mismo corazón que un Schutzstaffel. Ahora o nunca, llevas diciendo desde que saliste y ahora son ellos los que bailan y “qué más quieres?” le gritas al aire con la soberbia de los príncipes daneses. A punetazos contra nadie como los boxeadores retirados, a punialadas contra las paredes de la cocina alquilada, y así sabe el triunfo? a boca partida? Y tratas de escupir los dientes y te salen llamadas por teléfono a Mamá. Compréndeme vieja, es lo mejor que me ha pasado, ahí estaría con más imbéciles pero no me pagarían. Ella tiene mi corazón, por eso me lo pinto con tiza y voy tarateando los latidos para que no se note, “seré mentiroso” dices y detrás de la puerta cuelgan el uniforme, las pistolas y el látigo. “Te estás convirtiendo en otro que no conozco” escuchas debajo de la cama, quieres cerrar la ventana pero ya está cerrada, y te duermes por compasión contigo mismo, por una necesidad biológica, se necesita dormir para funcionar bien, no?.
Mira, si tuvieras que elegir entre un billete sin destino o quedarte donde estás... tú qué pillarías?.
1 Comment:
Hoy he cogido un filete de ternera crudo, lo he partido con las manos.
Vaya, me he quedado sin nada que comer hoy...solo he hecho un puré de vísceras....quería saber como era cortar carne cruda con las manos.
Me quedo donde estoy.
Post a Comment