“Y tú, porqué estás aquí?”

… Y la culpa fue mía, la verdad. A quién se le ocurre ir con el cuento de “ser un desconocido”?, a quién se le ocurre jugar con las armas de los jovencitos?. “Verás, disculpa si te molesto, sólo que estás aquí, sola, nosotros estamos allí, sabes?, creemos que todo esto es demasiado bonito para disfrutarlo a solas. Pásate cuando termines de comer, si quieres, claro”, le dije. “... con una invitación así, quién podría negarse?” contestó. Sonreí y volví a mi sitio. Diez minutos más tarde se acercaba a nuestra mesa con la sonrisa puesta y un plato de ensalada a medio comer.

Después simplemente paseamos por la orilla. “Special Lassi”, se llamaba lo que bebimos después. “Y tú, porqué estás aquí?” me preguntó

- Pues una amiga trabaja aquí. Sólo me invitó y pensé que sería una buena idea visitarla. Poco más. Y tú?.

- … Si te soy sincera, vas a pensar que estoy loca.

- Para eso están los desconocidos, para decirte la verdad, primero dispara, después te seré sincero yo.

- … Siempre he querido visitar este país. De alguna manera, siento que... como si ya hubiese vivido aquí. No sé, el tren me pareció tan familiar, y nunca estuve antes, y muchas cosas más... no te quiero asustar. Es como si tuviera que estar aquí. La semana pasada estuve en la “Peregrinación de la Luna Lena”.

- Vaya, es tan místico como suena?.

- Jamás he fumado tantísimos porros como allí. Parece que el turismo se lo está cargando todo.

- Toda una experiencia, supongo...

Noches de treinta y siete grados, el mar estaba caliente y el aire no refrescaba. Era el lugar donde el cielo lindaba con el infierno. La luna menguaba tras las palmeras y ella era artista. Sacamos unas mantas, las echamos sobre la arena y nos dedicamos a mirar a las estrellas y a fumar.

Y no hubieron besos ni abrazos apasionados. No nos desnudamos apresuradamente ni hubo pasión desenfrenada a oscuras ni desayunamos más besos en la ducha. Al despedirnos le dije “Sabes? Es una pena que sólo nos conozcamos un día. Tengo la sensación de que deberíamos ser viejos amigos ya, sólo hay una cosa en contra: el tiempo, y de ése no tenemos suficiente. Hagámoslo todo más corto, vale?. Somos viejos amigos ya?” volvió a sonreír y me dijo “Claro!, gracias por haberte acercado esta noche, seguimos en contacto, vale?”. Claro. Claro.

Después vino lo del tren a Mumbay, el metro, Prachi y Amit... un universo paralelo, la órbita de las estrellas fugaces, pide un deseo, volver a ver otra, “Special Lassi”, camisas blancas a mediatarde... Trenes.

Freitag, 20. April 2012

1 Comment:

Adriana said...

Has puesto una foto tuya! Qué bonita! Y cuando dijo, sí seguimos en contacto, rompió la magia preguntando si tenías Facebook? Y cuánto tiempo se quedaba? a mi me recorre por dentro el ritmo nervioso de los bichitos que caminan en línia y rápido... te tengo que contar.

Gracias por tu post! y por la foto! siempre, es un placer.

 
Bufaladas - Wordpress Themes is proudly powered by WordPress and themed by Mukkamu Templates Novo Blogger