Bajadas al infierno

Será por aquello del destino, el caso es que, periódicamente, hay que bajar sin esperarlo:

Pasé la noche entera en el camino de La Haya a Hannover de tren en tren, de estación en estación: Utrecht - Amersfoort - un pueblo perdido - Münster - Hamm - Hannover. Las estaciones eran paradas en un Limbo enrarecido. Debería relatar las almas despojadas que adornan las escaleras. Debería contar las caras y las cicatrices, los olores y los paseos de los policías. Debería contarlo todo.

Llegué a las seis y media de la madrugada.

Mittwoch, 8. Oktober 2008

2 Comments:

Unknown said...

Una temporada en el infierno
Montado en un tren como si fuera tu vida
Pasando el trago de ser tan intensamente
Uno más en el tren.

Quacking-pingüino absort-minded visions said...

El tren, ese gusano de irrealidades.

Sus ruedas pueden decapitar...

... es como deslizarse por algo que al fin y al cabo es el filo de una cuchilla de afeitar que se afila con su propio peso...

La pretensión del Coronel Kurtz la cumple cualquier cercanías...

 
Bufaladas - Wordpress Themes is proudly powered by WordPress and themed by Mukkamu Templates Novo Blogger